OPINION, 7 diciembre 2017
Hay muchas cosas que en este
país que no sabemos, no entendemos, de pronto no comprendemos hasta que vemos
la realidad ‘al final del túnel’ como dicen. Pero poder vislumbrar algo que no
ha nacido es casi imposible pensar que pasado el tiempo se ha logrado lo que
nunca se pensó. Todos pensamos en muchas cosas antes de venir acá, estando ya
aquí y mucho más cuando a través de los años y muchísimas experiencias nos damos
cuenta que todo es posible. Utilicemos acá lo que la gente llama “el sueño
americano”.
Cómo así que todo es
posible. Algunos consideran que soñar, por un lado, no cuesta nada razón por la
cual o se quedan soñando o se ponen a trabajar con “la fe de carpintero” y
logran tales sueños. Solo el tiempo nos convenció que “si se puede”, pero para
lograrlo no fue fácil, tampoco imposible. Se necesitaba “estar enamorado” de lo
que uno desea realizar, tener confianza en sí mismo, constancia, liderazgo y
saber golpear a las puertas donde está el futuro. Difícil sí, pero no
imposible.
Están por pasar 17 años en
este país y solo bendiciones hemos recibido. Dedicación y confianza en nuestros
principios, valores y deseos de alcanzar lo ‘quijotesco’, se ha hecho realidad.
No había que hacer complicados planes de viabilidad, factibilidad y todo lo que
se quiera, era tener voluntad y persistir y persistir, en otras palabras
trabajar. Si, trabajar ha sido el “ábrete sésamo” de nuestra idea inicial. Como
abrir una pequeña empresa. Si, una pequeña empresa con fines, pero sin dinero, con
todo por hacer. ¡Ah! teníamos lo más importante: preparación, experiencia y
deseos de crear un nombre, prestar un servicio a la comunidad, obviamente
gratis.
Han pasado 12 años cuando decidí
la creación de una organización que pudiera realizar sus objetivos sin los
problemas de limitaciones de juntas directivas, dinero y consumidores de
nuestro producto. La mejor decisión fue precisamente verme forzado a renunciar
a mi anterior organización, de la cual había sido fundador. Se derrumbaba en término
de segundos lo que había costado trabajo y dedicación, durante más de dos años.
Pero se había ganado en experiencia y lo más importante en ‘quijotes’, si,
personas e instituciones que tenían confianza en nuestra capacidad para
sobrevivir y hacer nombre.
Pero todo tiene un
principio. Recuerdo muy bien el consejo que nuestra vicepresidenta, y quien
diera vida a la fase legal de constitución de la organización, me diera cuando
creamos Hispanics in Action, Inc. “Dígame como la quiere”. Yo dije “quiero ser
el responsable de que nazca y funcione”. Y así quedó por escrito y así se ha
cumplido. Obvio que quienes han dado vida a esta organización han sido nuestros
profesores voluntarios y más de 11 instituciones privadas y públicas que dieron
vida a la organización. Han pasado 12 años en que sin necesidad de oficina,
secretaria, portero, profesores privados, campañas publicitarias, viajes,
presupuesto, etc. etc. hayamos sobrevivido.
¿A qué viene esta reflexión?
Sencillo, “cuando uno quiere uno puede”. Pero esto requiere firme decisión y
adelante. He utilizado parte del poema de Antonio Machado: “caminante, no hay
camino, se hace camino al andar”, pero mucho mejor “se logra lo que se desea si
uno tiene fe en sí mismo” y sus ideales están por encima de cualquier percance.
La enseñanza de idiomas en
forma conversacional nos ha dado un completo éxito, en particular español con
el máximo de cursos, francés con cursos para principiantes, intermedio e
inclusive literatura francesa, inglés e italiano con nivel intermedio y cursos
cortos como “A real trip to Italy”, en cooperación con el sistema de
Bibliotecas del condado Martin.
Que tal nuestra primera
clase en vivo y en directo a través de WhatsApp. Sí, es tal el interés de
nuestros estudiantes por no perder el seguimiento de su clase, que uno de ellos
me consultó la viabilidad de transmitir la clase a la ciudad donde estaría
trabajando. Con gusto. El día 2 de diciembre pidió a su esposa, quien asiste a
clase de español, que instalara su cámara en nuestra aula de clase en el
Savannas Preserve State Park, Port St. Lucie, en la clase de las 10 a.m.
Transmisión perfecta a través de WhatsApp.
¿Podemos considerar que una
pequeña empresa pueda avanzar tanto en 12 años de operación?
Con transmisión en vivo,
utilizando la moderna tecnología sin necesidad de disponer de recursos
económicos. ¿Imposible verdad? Bueno ahí
estamos como ejemplo, como dijo el expresidente Obama, “Yes we can”.
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