OPINION, 2 noviembre 2017
No hay duda que con mayor
frecuencia de la que suponemos, entramos en duda que será lo más adecuado para
lograr lo que llamamos éxito. Ya sea solos, acompañados, con capital o sin él,
dentro de una empresa o fuera de ella, en la comunidad o en otro país, etc. A
veces vencemos cualquier barrera para superar lo que nos limita alcanzar lo
deseado, una vez logrado, nos puede pasar que eso no era lo que buscábamos. O
no funcionó. Bueno existen tantas variables como oportunidades.
Por otro lado hay personas
que hacen lo que creen que los llevará lejos y les funciona. En otras
palabras no podemos dejar al destino que
nos indique que es lo que debemos hacer. Mi experiencia personal es “que uno
hace camino al andar”. Parece ridículo, pero a mí me funcionó. Poco a poco fui
encontrando lo que “pensaba” era lo mío. Y Dios me fue poniendo precisamente en
el lugar que me permitía dar el salto al siguiente peldaño.
Esto hizo que en relativo
corto tiempo me llegara lo que yo nunca esperaba. Comprendo que hoy en día las
cosas pueden ser diferentes. Nos vinimos de nuestros países con la esperanza de
que aquí si lograríamos la realización de nuestros sueños. Obvio no tomamos en
cuenta muchísimos factores que podrían dificultar su logro, o por el contrario
que tales falencias les iban a abrir las puertas que en otras partes se
cerraron.
No hace mucho conocí un
ingeniero de sistemas, con mentalidad empresarial, con visión y deseos de
lograr lo suyo para ‘ayer’. Podría uno decir que se vino a las ciegas, no, él
sabía lo que hacía. Rápidamente logró trabajo, lejos pero lo logró. Su
capacidad para el manejo de sistemas hizo que la compañía lo apoyara de
inmediato, ellos no hubieran podido lograr sus metas de no ser por la capacidad
de este joven talento. ¡Ah! Pero no dominaba el inglés. El problema no era el
idioma, eran los programas y ese lenguaje, si lo dominaba. Allí cualquier
diferencia se superaba, lo importante eran los programas que él producía, que satisfacían
las necesidades de la compañía.
Pero no siempre eso es así. Por
ejemplo, una ingeniera de sistemas, eso dijo ella, tuvo vacaciones de su organización.
Al parecer ella no trabajaba en su ‘especialidad’. Me llamó comentándome que
deseaba trabajar durante sus vacaciones. Sabiendo lo que sucede en Silicon
Valley, con quienes tienen mentalidad creadora, le dije: “¿Por qué no desarrollas
programas que necesiten las empresas locales y los vendes? Nunca me volvió a llamar. Seguramente tuvo
completo éxito y ahora hay una vacante en el lugar donde trabajaba.
Leía un artículo en la
edición de octubre, 2017 de Fortune, pag. 34 bajo el título: ‘Finding an
“Ocean” free from rivals”, que identifica un libro: “Blue Ocean Shift, beyond
competing”, donde las compañías debieran parar de derrotar la competencia y en
su lugar buscar hasta encontrar “blue oceans” – en otras palabras - nuevos
mercados o innovaciones y crear una nueva demanda.
En otras palabras, de una
empresa que no funciona exitosamente, analizar la razón y superarla, dando
lugar para la creación de una nueva empresa exitosa. En otras palabras nosotros
debemos contar con una mente supercreativa que en cada empresa veamos nuevas
formas de lograr lo que ellos no ven. Difícil pero no imposible. Ellos
mencionan la compañía Life coaching, es una industria de más de 2 mil millones
de dólares que no existía hace 25 años,
y hoy en día es la compañía de profesión de crecimiento más exitosa en América.
Viagra es otro ejemplo.
Para cerrar tal articulo
ellos dicen que “Tu no ganaras si tratas de imitar. Tu no puedes crear un nuevo
Uber o un nuevo Airbnb. Esa no es la forma como ‘los aceanos azules” se crean.
Indudable, debemos buscar
las oportunidades donde ellas se encuentren. Primero debemos estar preparados
para tal búsqueda. Con el conocimiento básico buscaremos donde hayan “océanos”,
mejor dicho lo que consideremos las oportunidades que nos darán el norte de
nuestras ilusiones. Seguramente que al encontrar ese oportunid, necesitaramos recursos tanto económicos,
humanos y tecnológicos que aseguren el desarrollo y exito de la nueva empresa.
Ahí esta Elon Mosk,
ofreciendo su proyecto de energía solar para restablecer la perdida en Puerto
Rico. El ya lo ha logrado en islas mas pequeñas, asi que no será difícil en ese
estado, solo que el cambio del sistema de generación eléctrica a placas
solares, seguramente, valdrán una fortuna.
Regresemos a nosotros, Hace
17 años cuando llegamos a este pais yo pensé que el ingles seria un negocio
fabuloso. Nunca pensé que estaría equivocado. Hoy hemos tenido que cerrar dos
cursos, por falta de estudiantes. Pero enseñar francés y español han sido un
notable exito. En francés tenemos un curso para principiantes, uno para nivel
intermedio y una para avanzado en Literatura Francesa, 13 clases de español, 22
instructores voluntarios y 14 instituciones donde enseñamos, además, italiano,
ingles y español. ¡Y todo gratis!
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