sábado, 25 de septiembre de 2021

QUE ESTAMOS HACIENDO DESPUES DE LOS 80

 OPINION, 29 septiembre 2021

Cuando hablamos sobre las personas de mayor edad, nos referimos a aquellos que han pasado los 60? No sería mejor los70? De pronto muy jóvenes, que tal mejor los 80. Sí, creo que por los 80 podríamos comentar algunas cosas que nos pueden pasar y ver en qué forma podemos sortearlas inteligentemente como si tuviéramos, digamos para ser positivos, los 25 años, de vida, no de experiencia, ya que eso sería otro indicador, que no tomaremos en cuenta en este artículo.

¿Porque digo los 80? Obvio, hace un par de años los superé exitosamente. Si, seguí trabajando activamente, e inclusive llegué a dormir alrededor de las 12 de la noche. Y no fui a dormir a esa hora por insomnio, entiendo que insomnio es cuando el sueño no nos llega y tenemos que tomar alguna pastilla para caer dormidos. No, tareas de mis estudiantes e investigación donde encontrar lo que otros ni siquiera han pensado que existe.


Les comentaré, en función de más de los 80, algunas acciones que he o hemos realizado, con notable éxito, pero con un cuidado y estrategia que nunca hubiera realizado en otra época de mi vida. Hablemos ahora de: Cita en nuestro consulado en Orlando.

Lo primero conseguir cita. Un poco demorado por desconocimiento del procedimiento a seguir. Hay que realizarlo a través del computador, segundo, definición de qué documentos llevar y pago a realizar. Tuve conocimiento que en otro consulado se podía pagar inclusive con tarjeta de crédito, pero no acá. Esto junto con documentos y pasaporte. Determinación hora de la cita: 8:40 a.m.

Se inició, la programación del viaje. Normalmente uno viaja con su propio cronometro, me explico, a la hora que sea, pero otra es cuando si no llega tiene que volver a solicitar nueva cita. Estando la fecha de vencimiento muy cerca, era un problema. ¿Cómo llegar? Bueno, debo reconocer que Christopher Columbus no tuvo que consultar sus mapas para descubrirnos, bueno pero nosotros sí.

Una vez que tuve la dirección, entré en contacto con Google.com para averiguar cómo llegar a mi dirección con un par de horas antes de la cita. El avance de la tecnología me permitió, en internet, seguir nuestro viaje con tal grado de seguridad en sus mapas, direcciones, puentes, peajes, etc. que exitosamente llegamos con las dos horas de anticipación. Mi obsesión, cumplir con lo propuesto, para lo cual debía prepararme adecuadamente y así lo cumplí.

Visita al oftalmólogo. No es que no vea, inclusive a mi corta edad leo sin ellos, pero sí los necesito para evitar los rayos que emana la pantalla del computador. Hace un poco más de un año tuve que visitarlo. Dado que mi oftalmólogo no se encontraba me asignaron otro. Muy formal, pero me dejo inquieto pues habló de cirugía de cataratas y que al hacerla se podría tratar el glaucoma. ¡Wow! Tremendo, nunca pensé que esto me podría pasar a mí. Aun así, él me recetó un medicamento que mantendría mis ojos bajo control.

A los seis meses pedí cita con mi oftalmólogo regular.

Él me recomendó seguir con el mismo medicamento y que en próxima cita veríamos que reacciones aparecían. Me tranquilizó. Al mismo tiempo mirando YouTube.com encontré una señora que anunciaba como reducir o acabar con las cataratas.

Formula: Cuatro cucharadas de té ( Perfect for red raspberry leaf tea ) y una tasa de  rosas rojas. Hervir cuatro tasas de agua. Colocarlas en un recipiente de vidrio las 4 cucharadas de té y las rosas rojas. Revolverlas con una cuchara por unos 3 minutos. Luego tapar el recipiente de vidrio con aluminio foil (papel celofan) hasta que se enfrié. Luego filtrarlo.

Mantenerlo en un recipiente en la nevera. Cuando se vaya a utilizar, tener las manos limpias, humeder dos algodones,  pasando uno por cada ojo, uno vez en la mañana y otra antes de acostarse, durante tres meses.

Yo estaba muy expectante por visitar mi odontólogo para saber cuál sería su concepto. Me dijo que todo marchaba muy bien, que continuara con el medicamento que me habían prescrito. Que nos viéramos en seis meses nuevamente. No le dije nada, pero su actitud para mí era la mejor respuesta. Nada de cirugía como había dicho mi anterior oftalmólogo. ¡Que más quería yo!

 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.